Cómo la Cooperación hace de la familia un equipo
por Esther Pagán
Cuando pienso en la palabra equipo viene a mi mente un equipo de baloncesto. No sé mucho de deporte pero aún con lo poco que sé puedo ver como cada jugador está atento a las oportunidades que se puedan dar para hacer su parte para lograr la meta que es ganar el juego. Hay entusiasmo, disposición y un corazón comprometido, para entre todos lograr la victoria.
Cuando escucho la palabra cooperación recuerdo el símbolo de dos pinos y la explicación de lo que es un grupo cooperativo. Cuando estaba en la escuela nos explicaban la importancia de este sistema de trabajo, que unidos como equipo nos impulsaba hacia una meta en común con el esfuerzo de todos. Así que para que un grupo de personas se puedan calificar como equipo se deben dar algunas características. Podemos afirmar que las personas que aprenden a trabajar en grupo unidos y cooperando unos con otros tienen más posibilidades de lograr sus metas exitosamente.
Pero cuán difícil se nos puede hacer lograr la cooperación y sentirnos como un gran equipo en nuestras familias. Hoy más que nunca estamos llamados a cooperar unos con los otros. En el pasado las tareas estaban definidas por nuestro sexo o por el rol asignado. Mi mamá me contaba que ellos eran ocho hermanos, a ella le tocaba limpiar la cocina siempre. A su hermana le tocaba planchar y en esa época planchaban hasta las sábanas. En el caso de los varones nunca supe que le asignaban se los dejo a su imaginación. Pero hoy en día en la mayoría de las familias ambos padres trabajan y ambos son proveedores. La época que todas las tareas del hogar le tocan a mamá ya a pasado. Recuerdo como mamá que colocaba tres jaras de agua en la nevera para tener agua fría. Cuantas veces encontré las tres jaras con un poquito de agua porque al parecer todos en la familia querían agua fría pero no estaban dispuesto a llenar la jara ¿les ha pasado?
Pero tener asignada una tarea muchas veces representa una obligación y no una actitud de cooperación. Aunque ser parte de un hogar implica deberes, para que la armonía prevalezca debemos brindar una cooperación llena de compasión y compromiso. La cooperación que les quiero compartir es esa la que no es impuesta es la que sale del corazón por amor, esa cooperación que necesariamente no se da solo cuando me toca. Es esa que cuando vemos un hijo o hermano atrasado en sus tareas escolares y decidimos darle la mano, es cuando vemos a mamá cansada y le decimos: - mami hoy yo cocino. Es cuando vemos a nuestra hermana o hermano volviéndose loco por un proyecto de la universidad y le decimos ¿cómo te ayudo?. Es cuando vemos nuestro padre limpiando el patio extenuado por el calor y le preparamos una limonada. Son esas pequeñas expresiones de valorar a nuestras familia y estar dispuesto a darles la mano aunque pensemos que no nos toca.
Esto me lleva a Jesús, ¿por qué tenía que morir por nosotros? Simplemente por amor, aunque no le tocaba. Muchas veces décimos sí yo amo a mi familia, sin embargo nuestra conducta y actitudes no reflejan ese amor. Así que si tienes una familia, eres bendecido y si la amas, has evidente ese amor a través de tu conducta. Una de esas cosas que puedes hacer es tener una actitud de cooperación. Para lograrlo tienes que tener empatía esto te llevará a ver donde el otro necesita de tu cooperación. Además debes tener disposición para sacar de tu tiempo para cooperar con el otro. Cuando esas cosas suceden podemos convertimos en un gran equipo porque todos estamos enfocados en ser una Familia cooperadora unos con otros.
Así que te ánimo que ores :
Señor gracias por darte por amor a nosotros y por ver nuestras necesidades y suplirlas. Ayúdame o Dios a tener un corazón como el tuyo a ver la necesidad de mi familia a no tener un corazón egoísta y a tener el deseo de cooperar y ayudar a mi Familia. Pon ese deseo en mi corazón para agradarte a ti y para que seamos una mejor Familia y aprendamos ayudarnos unos a otro.
Amen
Hoy es un buen día para
cooperar en tu famila. Porque las familias que cooperan unos con otros son mejores familias, has que la tuya sea una de ellas. ❤️
Cuando escucho la palabra cooperación recuerdo el símbolo de dos pinos y la explicación de lo que es un grupo cooperativo. Cuando estaba en la escuela nos explicaban la importancia de este sistema de trabajo, que unidos como equipo nos impulsaba hacia una meta en común con el esfuerzo de todos. Así que para que un grupo de personas se puedan calificar como equipo se deben dar algunas características. Podemos afirmar que las personas que aprenden a trabajar en grupo unidos y cooperando unos con otros tienen más posibilidades de lograr sus metas exitosamente.
Pero cuán difícil se nos puede hacer lograr la cooperación y sentirnos como un gran equipo en nuestras familias. Hoy más que nunca estamos llamados a cooperar unos con los otros. En el pasado las tareas estaban definidas por nuestro sexo o por el rol asignado. Mi mamá me contaba que ellos eran ocho hermanos, a ella le tocaba limpiar la cocina siempre. A su hermana le tocaba planchar y en esa época planchaban hasta las sábanas. En el caso de los varones nunca supe que le asignaban se los dejo a su imaginación. Pero hoy en día en la mayoría de las familias ambos padres trabajan y ambos son proveedores. La época que todas las tareas del hogar le tocan a mamá ya a pasado. Recuerdo como mamá que colocaba tres jaras de agua en la nevera para tener agua fría. Cuantas veces encontré las tres jaras con un poquito de agua porque al parecer todos en la familia querían agua fría pero no estaban dispuesto a llenar la jara ¿les ha pasado?
Pero tener asignada una tarea muchas veces representa una obligación y no una actitud de cooperación. Aunque ser parte de un hogar implica deberes, para que la armonía prevalezca debemos brindar una cooperación llena de compasión y compromiso. La cooperación que les quiero compartir es esa la que no es impuesta es la que sale del corazón por amor, esa cooperación que necesariamente no se da solo cuando me toca. Es esa que cuando vemos un hijo o hermano atrasado en sus tareas escolares y decidimos darle la mano, es cuando vemos a mamá cansada y le decimos: - mami hoy yo cocino. Es cuando vemos a nuestra hermana o hermano volviéndose loco por un proyecto de la universidad y le decimos ¿cómo te ayudo?. Es cuando vemos nuestro padre limpiando el patio extenuado por el calor y le preparamos una limonada. Son esas pequeñas expresiones de valorar a nuestras familia y estar dispuesto a darles la mano aunque pensemos que no nos toca.
Esto me lleva a Jesús, ¿por qué tenía que morir por nosotros? Simplemente por amor, aunque no le tocaba. Muchas veces décimos sí yo amo a mi familia, sin embargo nuestra conducta y actitudes no reflejan ese amor. Así que si tienes una familia, eres bendecido y si la amas, has evidente ese amor a través de tu conducta. Una de esas cosas que puedes hacer es tener una actitud de cooperación. Para lograrlo tienes que tener empatía esto te llevará a ver donde el otro necesita de tu cooperación. Además debes tener disposición para sacar de tu tiempo para cooperar con el otro. Cuando esas cosas suceden podemos convertimos en un gran equipo porque todos estamos enfocados en ser una Familia cooperadora unos con otros.
Así que te ánimo que ores :
Señor gracias por darte por amor a nosotros y por ver nuestras necesidades y suplirlas. Ayúdame o Dios a tener un corazón como el tuyo a ver la necesidad de mi familia a no tener un corazón egoísta y a tener el deseo de cooperar y ayudar a mi Familia. Pon ese deseo en mi corazón para agradarte a ti y para que seamos una mejor Familia y aprendamos ayudarnos unos a otro.
Amen
Hoy es un buen día para
cooperar en tu famila. Porque las familias que cooperan unos con otros son mejores familias, has que la tuya sea una de ellas. ❤️